Es bien sabido que en el mundo animal (y en él estamos incluídos) el comportamiento homosexual, si bien no es la norma, es bastante común. Hoy me llegó una historia de una parejita de pingüinos gays, Z y Vielpunkt (¡son alemanes!), que viven (o sobreviven) en un zoológico de dicho país, que no solo se comportan como cualquier otra pareja de pingüinos heterosexuales, es decir que mantienen una relación monogámica, ¡sino que además están criando un baby happy feet también!
Esto sucedió luego de que una pareja heterosexual reachazara su huevo, y los empleados del zoo decidieron dársela a estos dos, a ver qué onda, y voilá, lo cuidaron, nació el pequeñito y hace cuatro semanas que lo están criando como corresponde.
Antes, esta pareja (y otras dos más) habían estado intentando cuidar piedras como si fueran huevos, esperando que de allí saliera un bebé pingüino... Eso no resultó, claro. Al ver esto, los empleados del zoo habían querido traer un número de pingüinas ellas, pero activistas por los derechos homosexuales protestaron (¡y con razón!) y lograron que desistieran de ese plan.
Y bueno, carajo, si ellos pueden y son pingüinos, ¿por qué nosotros no?
Fuente
Mira!!!
ResponderBorrarEstoy re encanutada robando internet en el trabajo.
Entré con la contraseña de Raquel. Opaaa!!!
Estem...yo siempre quise tener un germinador contigo.
Love you!
bye