miércoles, 20 de abril de 2011

Cronos.

¿Por qué será que cada vez que siento algo gotear, siempre lo hace al ritmo de los latidos de mi corazón? Siento una gota gruesa chocar contra un cartón olvidado en la terraza. Marca los segundos con más precisión que el reloj que abandoné en la cómoda al lado de mi cama. Murió, por tercera vez. La tercera es la vencida, supongo. Esta vez no voy a intentar revivirlo. Algunas cosas deberían permanecer muertas. Será que me llama la atención solo cuando se sincroniza conmigo, solo cuando extiende su lazo húmedo y fresco hacia mis arterias hirviendo. Ah, se hizo más lento. No me queda mucho tiempo. Un día próximo a la fecha tendrá como objeto recordármelo. ¿Y qué queda si no la carcasa? Como el gris metálico arañado en mi mesa, mi piel lacerada adquirirá un tono plomizo a su vez. Todo quien me haya tocado alguna vez, de tez lustrosa y vital, apoyará sus manos en mi frío polar. En mi muerte. No es necesaria tu presencia, Parca. Alguien ya te arrebató este vigor incandescente. Pero espera un momento, todavía no ha acabado. Después de todo si el tiempo pudo retractarse, también yo.

2 comentarios:

  1. No. Es "carcasa". Buscalo en http://buscon.rae.es/draeI/

    De hecho yo pensaba que era "carcaza" pero lo busqué por las dudas y me encontré con que iba con "s".

    ResponderBorrar